Correr un maratón es ponerte a prueba física, mental y psicológicamente; por eso, es necesario que lleves a cabo una dieta rigurosa que te proporcione la energía necesaria.
Ya sean 5, 10, 21 o 42 kilómetros, el maratón es uno de los deportes que requiere de mayor resistencia, por ello además de cumplir con las debidas sesiones de entrenamiento, es necesario que tengas una dieta equilibrada y variada, basada principalmente en una ingesta diaria de carbohidratos y líquidos, la cual debe estar adaptada y personalizada según tus características fisiológicas.
Un buen momento para experimentar con nuevos alimentos e implementes estrategias nutricionales es en los entrenamientos. De esta manera, podrás ir comprobando si tu cuerpo reacciona bien a los cambios; sin embargo, es importante que evites comenzar esta dieta 3 o 4 semanas antes de la carrera.
De acuerdo con los expertos en nutrición deportiva, un corredor debe incluir en su dieta lo siguiente:
-Carbohidratos. Incluye cereales, legumbres, arroz, pasta, pan y demás harinas que representen una fuente de energía para tu sistema muscular durante el ejercicio. Si no consumes suficientes carbohidratos, podrías tener dificultades para finalizar la carrera, ya que tu cuerpo comenzará a quemar otras fuentes de energía, como las proteínas.
-Hidratación. Este aspecto es fundamental para un corredor. Hidrátate antes, durante y después del entrenamiento con agua y electrolitos para potenciar tu rendimiento y puedas tolerar mejor el consumo de líquidos durante el maratón.
-Proteínas. Son esenciales en la reconstrucción del músculo que se desgastan durante el entrenamiento. Los expertos sugieren que un corredor ingiera de 1.2 a 1.8 gramos de proteína por cada kilo de peso corporal. Algunas opciones son los mariscos, la carne de ave (pollo y pavo), los cortes con menos grasa (ternera y cerdo); así como los huevos y lácteos bajos en grasa.
-Vitamina C y E. La vitamina C juega un papel determinante como antioxidante, ya que ayuda a prevenir y proteger de enfermedades respiratorias y otros organismos patógenos que podrían causarte daño celular como consecuencia del ejercicio.
-Fibra. Ayuda a normalizar tu digestión y a reducir tus niveles de colesterol. Aunque depende de cada corredor, te aconsejamos que disminuyas la cantidad de fibra antes de la prueba, con el fin de evitar que surjan problemas intestinales.
Adicional, es recomendable tener el descanso adecuado la noche antes de la carrera. Y aunque estas pautas nutricionales son muy efectivas, recuerda siempre consultar a un especialista para conseguir mejores resultados. No olvides que en fresko.com.mxencuentras todo para comer sanamente y prepararte para tu siguiente reto deportivo.